entrenadordefutbol.blogia.com
¿QUÉ SUELE SUCEDER CUANDO SE
COMPITE PARA GANAR?
Se suele seleccionar a jugadores que están acelerados en sus
capacidades físicas, especialmente a los más fuertes. Ellos son los
titulares.
Se da menos importancia a su habilidad técnica, a la asistencia
regular, a su actitud y esfuerzos en los entrenamientos y al comportamiento
dentro del grupo
Hay menos posibilidades para los menos fuertes físicamente, para los
más jóvenes, para los mas retardados en su desarrollo y menos capaces. El futbol
es antidemocrático.
Desde los 8 años se da una desmesurada importancia a la táctica
colectiva.
Se aplica siempre el mismo sistema de juego.
Se busca inmediatamente la profundidad en el juego de ataque. El
equipo tiene prisa y juega más rápido de lo que es capaz.
Se juega muy verticalmente y se emplean frecuentemente y
preferiblemente pases largos (también el portero despeja con el
pie).
Pocas intenciones para construir el juego. Frecuentemente el balón no
pasa por el medio del campo y va directamente a los atacantes, mediante pases
largos.
Se realizan pocos cambios de orientación en las acciones
ofensivas.
El responsable es un entrenador/técnico que instruye con el fin de
ganar el partido y el campeonato.
El jugador debe obedecer al técnico que manda desde la línea
lateral.
En busca de la victoria enseña a ser desleal, hacer trampas, ser
deshonesto y engañar a los contrarios y al árbitro. Los fines justifican los
medios.
Se juega más contra que con el balón. No hay tiempo y espacio para
amagues.
Prematura especialización en una determinada demarcación o rol.
Juegan siempre los mismos y poco los suplentes.
Se expone al joven prematuramente a la competición de los adultos.
Dura años hasta que desarrolle los mismos hábitos que demuestran los adultos en
el juego 11 contra 11.
Se da una desmesurada importancia al trabajo físico porque así se
consiguen más rápidamente resultados.
Para poder ganar prevalece en los entrenamientos la aplicación de la
metodología tradicional.
Se valora más lo deportivo que las personas. Se aceptan
frecuentemente comportamientos discutibles para conseguir buen
resultado.
¿QUÉ SUELE SUCEDER CUANDO SE
COMPITE PARA FORMAR?
Todos juegan y no solo los más fuertes. Se prefiere a jugadores con
perspectivas en el manejo del balón e inteligencia.
El buen comportamiento fuera y dentro del campo es uno de los
criterios para la selección así como la voluntad de esforzarse.
Todos tienen los mismos derechos para jugar independientemente de su
físico y capacidad. El futbol es democrático.
El partido sirve para evaluar el grado de habilidad y ganar
experiencia en la táctica.
Se varía frecuentemente el sistema de juego.
Prevalece la cultura de mantener la posesión del balón. No hay prisa
en el juego.
Todos los jugadores tocan el balón. Prevalecen pases cortos y apoyos
cortos. El portero suele servir el balón con la mano.
El balón avanza generalmente de la defensa a los medio campistas y de
ellos a los atacantes, basándose el juego en los principios de comunicación y
cooperación.
Con el objetivo de crear espacios para la penetración, se cambia
frecuentemente la orientación en el ataque.
El responsable es un formador que estimula con el fin de mejorar el
rendimiento del jugador y de su equipo.
El jugador realiza la próxima acción en función de lo que él ha
observado y decidido. No decide el técnico para él.
Se enseña la deportividad, a la honestidad, a respetar el reglamento
y ser leal en las confrontaciones con los adversarios.
Se juega con el balón, acariciándolo. Hay tiempo para ejecutar fintas
y utilizar su fantasía e imaginación.
Todos reciben varias oportunidades, experimentan varios puestos y
roles en la competición. Juegan todos, independientemente de su
calidad.
Se adapta la competición en cada fase de la evolución del niño a sus
capacidades físicas e intelectuales.
Se busca respetar la naturaleza del niño y se mejoran las capacidades
condicionales y coordinativas con una gran variedad de juegos.
Para poder formar mejor al jugador debe prevalecer en las prácticas
la aplicación de la metodología activa.
Se da prioridad a la formación de la persona por medio del deporte.
Se utiliza el deporte como una escuela de la vida.
(Opiniones extraídas del libro "FUTBOL A LA MEDIDA DEL NIÑO”, de
Horst Wein).
DE ESTAS DIFERENCIAS
PODRIAMOS EXTRAER LAS SIGUIENTES CONCLUSIONES
En las categorías de formación, la práctica de un juego de buena
calidad deberá estar por encima de los resultados deportivos, porque para
enseñar a jugar bien es necesario olvidar los resultados y estar dispuestos a
correr riesgos tácticos, aunque el equipo adversario marque goles. Es importante
comprender que el juego es una extensión del proceso de
entrenamiento.
Buscar siempre la victoria, con gran desempeño y determinación,
intentando siempre jugar de la mejor forma posible y nunca intentar ganar a
cualquier precio, como si ganar ahora fuese lo más importante.
No debemos dar gran importancia a la derrota, pues perder es siempre
una posibilidad que existe en el transcurso de un partido y nunca hay garantías
de ganar. Pero si alguien nos gana, que sea el equipo que mejor juego a
desarrollado, pero nunca perder por no haber luchado con todas nuestras fuerzas.
Nuestros jugadores no se considerarán derrotados si han dado lo mejor de sí
mismos e hicieron todo lo posible para alcanzar la victoria.
Ganar no es tan bueno o importante como parece, ni perder tan malo.
No se puede asociar de una forma simplista la victoria con el éxito y la derrota
con el fracaso, ya que todo depende de cómo un equipo consigue esos resultados,
porque se puede ganar jugando muy mal y en un ambiente poco agradable, y perder
jugando muy bien y con un buen espíritu del grupo.
Hay que aprender a jugar como si fuese un entrenamiento y a entrenar
como su fuese un partido.
Ganar es la consecuencia de jugar bien, por tanto tenemos que estar
motivados y pensar en jugar siempre lo mejor posible, porque los resultados
aparecerán en el momento oportuno, como la fruta madura que cae por su propio
peso.
entrenadordefutbol.blogia.com