El Montilla CF realizó la pasada semana, prácticamente sin repercusión, un nuevo cambio de cromos en su plantilla. Se marchó José Almodóvar y llegó Eduardo Chía, un defensa pontanés que pasó por las categorías inferiores del Betis , Mairena , Alcalá de Guadaira y el Marbella, de donde tuvo que volverse por la realidad que asola el fútbol: los incumplimientos y los impagos.
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El jugador llega con mucho ánimo al equipo y no hay más que preguntarle por qué espera de esta etapa para comprobarlo. "Veo al equipo con capacidad como para salir del descenso", apunta. "Espero jugar los máximos partidos posibles y ayudar al equipo a salir de ahí. En mi opinión el Montilla tiene mejor plantilla que muchos equipos que están por encima. Y sobre todo tiene mas ilusión y mas capacidad de sacrificio. Hay muchos jugadores para los que es su primer año en la categoría y están muy ilusionados por hacerlo bien", apunta.
Y continuó relatando. "Fue una pena porque en un principio todo iba bien. Todo el mundo estaba ilusionado en el proyecto, había una plantilla joven muy buena con ganas de jugar y hacerlo bien para crecer como futbolistas pero al cabo de tres meses nos encontramos con esa situación. Varios jugadores decidimos irnos y el resto decidieron entrenar 2 dias como medida de presión hasta que nos pagaran alguna mensualidad atrasada. Y con ello han conseguido que el presidente de Madrid dimita. Ahora están esperando la entrada de un nuevo presidente. Así que parece que la situación anterior era real y el presidente no tenia recursos para pagarnos".
"El Montilla ha sido el equipo que ha mostrado más interés"
El central no tuvo dudas sobre qué paso dar. "La verdad es que el Montilla ha sido el equipo que ha prestado mas interés por mi desde un primer momento, por lo que decidí firmar aqui. Así estoy cerca de casa, que llevaba sin estar desde los 15 años. Ya he jugado el primer partido y muy contento", asegura. "Creo que he tomado una buena decisión en vernirme de allí y empezar de nuevo una etapa".
Lo cierto es que es un nuevo caso de cordobés más que regresa a la provincia. Una muestra de que el fútbol está muy mal y que hay que buscar otro modelo de gestión. "El futbol ha pegado un bajón muy grande debido a la crisis económica, por lo que muchos jugadores optan por venirse cerca de casa ya que los equipos han bajado sus presupuestos. Además hay mucha desconfianza por parte de los futbolistas, que ya que no se fían de los equipos cuando te llegan y te hacen una oferta para irte a jugar fuera de casa", apuntó. "En mi opinión, el futuro de los equipos va a ser jugar con jugadores de su provincia, ya que el tema económico ha bajado mucho y ya no se gana dinero, al menos en estas categorias de Tercera y Segunda B. Mientras siga esta crisis económica muchos equipos van a optar por fichar jugadores de la zona, que es lo que le permiten sus recursos económicos".
De hecho, Chía venía de estar un año sin jugar, formando parte incluso del equipo AFE para futbolistas en paro. Ahora vuelve poco a poco a la actividad normal. "En el Marbella empecé jugando todos los partidos, pero me lesioné y estuve un mes parado. Me perdí cuatro partidos y despues volví a jugar dos partidos antes de la reunión". Le dolió volverse porque veía que contaba. "Decidí no seguir porque yo era uno de los de fuera y no podía estar costeándome yo estar allí. No me salía rentable. Tenía que pagarme yo todo hasta enero o febrero, así que decidi buscarme equipo. Sabía que no era el mejor momento porque los equipos ya estaban hechos, pero el Montilla mostró interés por mí".
De momento todo pinta estupendo. "Hay un grupo humano muy bueno que desde un principio me ha acogido muy bien. Me han integrado y me han hecho formar parte del equipo muy rápido. Y el debut contra el Sevilla C fue bien, ya que lo considero un punto muy importante. Nos podemos acordar de él al final de temporada porque estuvimos jugando con un jugador menos desde el minuto 30 de la primera parte".
"Espero hacer una buena temporada para que me sirva de puente"
Para Chía es "muy importante" empezar jugando, porque su deseo íntimo es "hacer una buena temporada para que me sirva de puente para jugar en Segunda B de nuevo". "Desde un principio he contado con la confianza del mister, por lo que lo único que espero es seguir trabajando para hacerlo bien y devolverle esa confianza que está depositando en mi. Y entre todos salir de los puestos de descenso", concluye.