grada360.com
“He llegado a estar sin comer hasta cuatro y cinco días”. La frase del exfutbolista Crescencio Cuéllar, pronunciada durante una entrevista en el programa ‘El Larguero’ de la Cadena Ser, asusta. Sobrecoge. Sobre todo si se echa la vista atrás…
Crescencio Cuéllar se enfundó el traje de héroe deportivo el 27 de mayo de 1995. Ese día marcó el gol (el golazo) que daba el ascenso a Primera al Mérida. Cuéllar dio una alegría inmensa a mucha gente. Ahora en su vida no hay alegría. Y, prácticamente, tampoco hay gente.
Cuéllar está en paro y lleva ocho meses sin cobrar, como tantas y tantas personas. Vive, por así decirlo, en Olite (Navarra) con su exnovia a pesar de que se separó de ella hace unos meses. Después de dejar el fútbol estuvo haciendo molinos eólicos y montó una empresa de pintores con sus hermanos, pero la cosa salió mal. Con la empresa y, lo que es peor, también con los hermanos.
Ha tenido que pedir dinero y comida. Tiene dos hijos, una chica de 13 años y un niño de 10 que viven en Bilbao y a los que lleva muchos meses sin ver porque no tiene dinero para gasolina. Ni para pagar su manutención.
Athletic de Bilbao, Mérida, Eibar, Leganés, Toledo, Hércules, Burgos… Crescencio Cuéllar jugó en muchos equipos y conoció a mucha gente. Jugó más de 300 partidos en Segunda División. Muchos kilómetros recorridos. En el terreno de juego y en la carretera. Ahora lo que recorre son las calles a pie buscando un trabajo.
Con el Athletic jugó un partido en Primera. Fue en la temporada 1990-91 y el Athletic perdió en el Molinón ante el Sporting por 3-1. Crescencio jugó de titular y fue cambiado en el descanso. Aquel día también jugó Ernesto Valverde, hoy técnico del Valencia. O Rafa Alkorta, que jugaría después en el Real Madrid. Y, aunque no disputó ese partido, también estaba en aquel Athletic Josu Urrutia, actual presidente del club…