El Lucena CF consiguió olvidar esta mañana la
racha negativa de siete partidos sin ganar, anotando los tres puntos ante un
buen rival, como el CD Roquetas, al que doblegó gracias a un gol del argentino
Matías Saad en el segundo tiempo.
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Amonestaciones: tarjetas
amarillas a los locales Obregón y Jesús Lanza y expulsó al roquetero Juanje por
doble amonestación en el minuto 43.
INCIDENCIAS: Estadio Ciudad de
Lucena con asistencia de unos 2.000 espectadores. Se abrió oficialmente la grada
de Preferencia.
GOL
1-0 Min. 72 Matías Saad.
COMENTARIO:
El Lucena CF ha materializado en la matinal de
hoy domingo una importante victoria ante el CD Roquetas, al que ha derrotado con
un solitario tanto del delantero Matías Saad en el segundo tiempo, que ha
servido para romper una racha negativa de siete encuentros, en los que los
pupilos de Rafael Carrillo “Falete” tan solo habían sumado seis empates y una
derrota dolorosa hace dos semanas en casa ante el Caravaca-La Unión.
En la alineación titular de los locales destacaba
la vuelta del portero Vargas, tras las dos últimas actuaciones de Coca, en que
no estuvo muy acertado en los tantos del Caravaca-La Unión y Écija Balompié.
También, Matías Saad dejaba su puesto en el once al pequeño Hugo Díaz, mientras
que la vuelta del capitán Sarmiento suponía que por primera vez en esta
temporada Rubén Cuesta fuese relegado al banquillo.
El Roquetas se presentaba en Lucena como
vicecolista con 17 puntos, si bien a partir de mañana será el farolillo rojo al
ser excluidos del grupo IV de Segunda B el Poli Ejido y el Sporting Villanueva
por la doble incomparecencia a los dos primeros encuentros de la segunda vuelta.
Sin embargo, los almerienses dieron una magnífica imagen dando muestras que con
los seis fichajes que han realizado en el mercado de invierno pueden mejorar
notablemente su rendimiento en busca de la permanencia.
De hecho, en el primer periodo, el futbolista
clave del Lucena fue el portero Vargas, que en su regreso a la titularidad,
mostró unos reflejos
impresionantes salvando dos goles de forma providencial. En la primera ocasión
desvió con su mano derecha un cabezazo de Zamora tras la falta lateral botada
por Rubén Rivera. En la segunda le ganó la partida de forma felina a Beltrán
cuando se disponía a marcar.
Por el contrario, en el bando lucentinista la
primera oportunidad la tenía curiosamente el lateral derecho Fran González,
quien remataba a puerta en el segundo palo tras el centro de Quini, pero el
portero del Roquetas, José Miguel, despejaba a córner de forma segura, cuando se
cantaba el gol.
A la media hora de juego el veterano Jesús Lanza
ejecutaba un córner en forma de rosca al segundo palo, que remataba a puerta el
central Curro Vacas, pero de nuevo José Miguel desviaba a córner con
solvencia.
Pero, la mejor oportunidad del primer tiempo
correspondió al lucentinistita Quini, que encaró puerta por la banda derecha y
al borde del área lanzó un balón bombeado que se estrelló en el palo.
A falta de dos minutos, se producía una jugada
clave para el devenir del encuentro, por cuanto el lateral izquierdo del
Roquetas, Juanje, veía la segunda tarjeta amarilla por un codazo a un contrario,
por lo que los visitantes tenían que afrontar la segunda mitad con un jugador
menos.
Pero, realmente no se notaron muchas las diferencias, puesto que el
equipo de Gabriel Ramón Florit no le perdió la cara al partido en ningún momento
y trató de sorprender a la contra a los centrales Curro Vacas y Obregón, que
últimamente andan un poco descoordinados y lentos en sus cruces.
Nada más reanudarse el juego, el interior derecho
Quini se deshacía de su par y aprovechando la línea de fondo centró notablemente
para el atacante hispano argentino Fede, cuyo cabezazo salió fuera lamiendo el
poste.
La respuesta del Roquetas no se hizo esperar y
volvió a poner en apuros a Vargas, que tuvo que hacer un despeje acertado ante
una falta lanzada al borde del área con la rodilla.
En ese momento, el capitán lucentinista Sarmiento
dejaba su puesto a Rubén Cuesta, ya que Falete, que vio el partido desde la
grada por su sanción de tres encuentros, consideró que no era bueno agotar
físicamente al veterano futbolista de Villarrubia, que venía de recuperarse de
su lesión en el cuádriceps.
Con el cambio, Rubén Cuesta tomó las riendas del
equipo, asesorado de forma interesante por Jesús Lanza y Javi Lara, que trataban
de buscar la verticalidad a través de Quini y Fede por las bandas y el ariete
Hugo Díaz, que no tuvo su día, motivo por el que fue reemplazado por Matías Saad
en el minuto 62.
Y curiosamente, a los diez minutos de su
incorporación al terreno de juego, el delantero argentino anotaba de un limpio
cabezazo el gol de la victoria tras un magnífico córner, que ejecutaba Jesús
Lanza desde la banda izquierda con mucha rosca.
A partir de ese momento, Falete ordenó a los
suyos que trataran de mantener la posesión de balón y que buscasen el gol de la
tranquilidad
,
buscando sobre todo las incursiones de Quini por banda. Sin embargo, a
diferencia de los inicios ligueros, el de Fernán Núñez ya no desborda como
antes, posiblemente porque es más conocido por sus rivales.
El 2-0 pudo ser elaborado por Fede, pero su
lanzamiento salía fuera por poco. En los últimos minutos Obregón dejaba su
puesto a Sergio Castillo, que después de muchas jornadas sin tener minutos, tuvo
la capacidad de incorporarse al ataque en un córner. El malagueño remató de
acrobática chilena en el área pequeña, pero su lanzamiento fue detenido
felizmente para su equipo por José Miguel.
La puntilla pudo llegar en la jugada posterior,
con Quini como protagonista, pero su ajustado lanzamiento sobre el palo
izquierdo de José Miguel, que se encontraba ya batido, fue despejado en la línea
de gol de forma lamentable por Raúl Guillén, el capitán del Roquetas.
Con esa acción de gol desaprovechada se llegaba
al final del encuentro con la trabajada, pero sufrida victoria del Lucena, que
sirve para romper una mala racha y sobre todo para seguir soñando con estar en
los puestos nobles de la clasificación